Cómo elegir el mejor coche eléctrico para ti, paso a paso

Sabes que la movilidad eléctrica es una realidad, con un crecimiento imparable, y te estás planteando, por primera vez, abandonar el diésel o la gasolina y pasarte al coche eléctrico.

Ante ti, te encuentras una extensa oferta de vehículos, y no tienes ni idea de por dónde empezar, ni cuál es el automóvil que mejor se adapta a tus necesidades.

Desde Movelco, queremos ser tu impulso eléctrico, y vamos a ayudarte, paso a paso, a decidir qué coche es el mejor para ti, teniendo en cuenta factores como la autonomía, el uso que vas a dar, el presupuesto, o la zona donde vives.

Empezamos.

1. ¿Para qué utilizas el coche?

La primera pregunta que debes hacerte es sobre el uso que vas a darle a tu vehículo.

Piensa en tu vida cotidiana: ¿utilizas el coche a diario para trayectos cortos como ir al trabajo?, ¿lo usas más para viajes largos?, ¿lo empleas para trabajo y también para ocio?, ¿es un coche de empresa que sólo conduces para tus viajes profesionales?, ¿estos son cortos –visitas comerciales dentro de tu localidad o provincia– o son viajes largos –a otras provincias o autonomías–?

Es importante que pienses si tus trayectos habituales son de muchos o de pocos kilómetros, ya que eso te dará una pista sobre la autonomía que necesitas.

También analiza otros aspectos, como cuántos miembros sois en la familia, en el caso de que lo destines a uso familiar; si necesitas capacidad en el maletero para poder transportar objetos, o si por el contrario, sueles moverte solo y sin equipaje o mercancía.

En este primer paso, podrás limitar ya tu búsqueda a una docena de modelos, pues no es lo mismo un comercial de empresa que cubre el área de Madrid y necesita un coche pequeño para muchos trayectos pero de pocos kilómetros, a un padre o madre de familia, con tres hijos, que cada 15 días se desplazan al pueblo a 200 km de distancia…

Y así llegamos al paso 2…

Coche electrico cargando parking exterior
No es lo mismo usar el coche eléctrico para viajes largos que para hacer la compra

2. ¿Qué autonomía necesitas?

Teniendo en cuenta lo anterior, empieza a mirar la autonomía de los modelos que más se ajustan a los usos que le darás a tu coche.

Si, por ejemplo, eres un directivo de una empresa con delegaciones en varias comunidades que todos los meses realiza viajes largos, de más de 200 km, debes buscarte un vehículo con bastante autonomía… Te recomendamos que te decidas por uno que supere los 400 km. Y deberías pensar –si es que aún no lo has hecho– en instalar puntos de recarga en tu empresa, aspecto que vamos a tratar más adelante.

Si, por el contrario, eres un profesor que conduce de casa a la facultad, apenas unos 15-20 km al día, no necesitas una gran autonomía, y sería suficiente e incluso menos aparatoso, un utilitario.

Si tu caso es el de una familia que solo mueve el coche los fines de semana para ir al campo, a la playa o al cine, te conviene un vehículo grande, pero que no necesita de una gran capacidad de batería. Con una autonomía media de 300 km será suficiente.

3. ¿Dónde vives?

No es lo mismo vivir en ciudad que en una zona rural. En ciudad siempre vas a necesitar menos autonomía. Vas a tener que cambiar el chip de cálculo de consumo en ciudad y en carretera, ya que ahora estás acostumbrado a que tu coche diésel o gasolina consumiera mucho más en áreas urbanas y menos en carretera, y el eléctrico es justo al revés: el consumo, en ciudad, será menor, e incluso en atascos es mínimo.

Si, por el contrario, vives en zona rural, posiblemente utilices más la carretera, y necesitarás mejor respuesta para subir y bajar montañas, por ejemplo. En ese caso, asegúrate de tener buena autonomía.

Es importante, en todos los casos, que tengas en cuenta si vas a recargar tu coche en casa o en otro lugar… Y aquí pasamos al cuarto paso, muy ligado a este que te acabamos de explicar.

Coche eléctrico cargando
Es importante comprobar si en tu zona hay puntos de recarga de acceso público

4. ¿Hay puntos de recarga en tu zona?

Aunque los planes del Gobierno y de la Unión Europea contemplan un incremento exponencial de los puntos de recarga en toda la red de carreteras, a día de hoy todavía hay una escasez de infraestructuras, sobre todo en las zonas más alejadas de núcleos urbanos.

Por eso, debes conocer la disponibilidad de puntos de recarga de acceso público en la zona en la que vives, y también si en tu trabajo dispones de cargadores para coche eléctrico.

Si eres empresario o directivo de una firma, como avanzábamos antes, es más que recomendable que instales puntos de recarga en tu compañía. Nos atrevemos a decirte que es indispensable.

Las ventajas son muchas: te estarás adaptando a la movilidad que viene, dispones de ayudas para hacerlo (punto que tocamos más adelante), mejorarás tu imagen de empresa comprometida con el medio ambiente y también con la innovación, y, además, en Movelco te ofrecemos soluciones personalizadas a medida, sin compromiso de permanencia con ninguna compañía eléctrica, y que podemos gestionar por ti.

Por supuesto, es fundamental que en casa dispongas también de punto de recarga, y en Movelco los tenemos igualmente para todo tipo de vivienda, sea unifamiliar o en garaje comunitario.

5. ¿De qué presupuesto dispones?

Llegados a este punto, toca hacer cuentas. Pero es un error fijarse sólo en el precio del vehículo, ya que hay muchos otros factores que te van a afectar en términos económicos, tales como el consumo, el mantenimiento o los impuestos.

Por eso, cuando hablamos de presupuesto, no nos referimos al momento puntual, sino a tus ingresos económicos habituales. Y para dejarlo claro, vamos a detenernos un poco más en este punto y explicarte en qué debes fijarte:

  1. Precio de venta del vehículo. Evidentemente, no es lo mismo un ZOE o un Leaf que un Tesla o un Porsche… El precio es importante que se adapte también a tu economía.
  2. Impuestos. El coche eléctrico está exento de pagar impuesto de matriculación y tiene bonificado el de circulación en muchas ciudades. De media, pagarás un 75% menos de impuestos y tasas municipales.
  3. Aparcamiento gratis. En muchas ciudades, los vehículos eléctricos aparcan gratis en zona ORA, e incluso en zonas donde está prohibido siquiera acceder para otros coches.
  4. Ayudas públicas. El Plan Moves III continúa vigente y puede suponer un ahorro de hasta 7.000€ en la adquisición de un coche eléctrico, y de hasta el 80% en la instalación y compra de puntos de recarga. Es un momento perfecto para pasarte al eléctrico. En Movelco, además, te tramitamos estas subvenciones.
  5. Mantenimiento. Los coches eléctricos tienen cerca de mil componentes menos que los de combustión, con lo que el gasto en mantenimiento es muy inferior (cerca de un 40% menos).
  6. Consumo. Aunque la electricidad ha subido, el gasóleo y la gasolina también se han disparado. ¡Y mucho! Por tanto, continúa siendo mucho más barato recargar un coche eléctrico que llenar el depósito de uno de combustión.

Teniendo en cuenta todos estos factores, y según estudios de organismos externos e imparciales como la OCU, a día de hoy el coche eléctrico, a largo plazo, es más barato.

Para calcular el coste de tu coche eléctrico, debes tener en cuenta muchos factores

6. ¿Necesitas realmente comprar?

El sexto y último paso, una vez que tienes claro qué vehículo se adapta a ti, consiste en que te plantees si realmente necesitas comprar un coche eléctrico, en propiedad.

Decimos esto porque cada vez tienen mayor éxito fórmulas como el renting o el carsharing, gracias a las cuales tu única preocupación será, básicamente, conducir y recargar, ya que del resto se encargan empresas como la nuestra.

De hecho, en el caso de Movelco, estamos especializados en renting y carsharing para empresas, y los resultados obtenidos por nuestros clientes avalan que, con ambas fórmulas, no sólo se genera un ahorro sino que, además, se optimiza el uso de las flotas. Y, por cierto, las ayudas comentadas del Plan Moves III también se aplican al renting.

 

Si aún así no tienes claro qué coche eléctrico es el que mejor se amolda a ti, en Movelco estamos listos para asesorarte y a acompañarte en el proceso de cambio a la movilidad eléctrica. ¿Hablamos?